Esta es una carta de despedida, amor. Es una carta de liberación con la que te digo adiós. Esta es mi pobre forma de salir de esto y no volver jamás, la forma cobarde de abandonarte y huir. Pero yo no soy cobarde, lo eres tú.
Cuando me gritas e insultas en la calle.
Cuando huyo y me atrapas.
Cuando me pegas estando borracho.
Cuando me agarras fuerte y haces conmigo lo que quieres.
Pero ahora para mí no habrá más gritos, serán tuyos todos los del mundo. Para mí ya no habrá vergüenza, a ti te perseguirá toda la vida. No recibiré más miradas lascivas, pero a ti te acosarán siempre, vayas a donde vayas.
Adiós amor, hasta siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario